La misma semana en que hemos conocido que España creció en 2018 dos décimas menos de lo previsto en marzo por el INE, que ha dejado la cifra final en el 2,4%, la CEOE ha expresado su malestar por el panorama político y por cómo la falta de estabilidad estaría gravando la desaceleración. Según ha expresado el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, la repetición electoral supone un «fracaso colectivo general» que perjudica las inversiones, el empleo y las exportaciones y también a las empresas, pues la falta de financiación autonómica está provocando ya retrasos en los pagos de las administraciones a sus proveedores. Garamendi ha insistido en que la confianza es fundamental para la buena marcha del país y ha denunciado que la falta de ella ha provocado que la contratación indefinida esté cayendo al 19% cuando en 2018 crecía a tasas cercanas al 20%. El dirigente empresarial ha animado a la clase política a tomar ejemplo de las negociaciones que empresarios y sindicatos llevan a cabo para pactar anualmente unos 5.000 convenios colectivos, pues a pesar de que a ambas partes les separan «muchas cosas», se sientan, hablan y negocian. «Es lo mínimo que se les puede pedir a los políticos», ha añadido.
