Con el toro Granado de la ganadería azteca de Piedras Negras recibió la alternativa, el 3 de noviembre de 1929, el torero Carmelo Pérez Gutiérrez. El escenario fue la plaza de toros “El Toreo” de México siendo el padrino Joaquín Rodríguez “Cagancho” y el testigo Heriberto García.
En la Real Maestranza de Caballería de Sevilla se lidiaron novillos del marqués de Villamarta, don Álvaro Dávila y Agreda, el 3 de noviembre de 1940. Resultó triunfador de la tarde Antonio Bienvenida que le cortó una oreja al primero y las dos al cuarto; fueron sus compañeros Bonifacio García “El Yoni” y Miguel del Pino. En el tercio de quites del quinto toro, estuvo sensacional “El Yoni” toreando a la verónica y, en su turno, replicó Antonio Bienvenida por chicuelinas con las manos bajísimas; tres chicuelinas inmensas que alguien definió como ¡el quite del milagro! Y algún revistero le denominó “el quite de la escoba” y aseveró que “toreando así, barría todo lo que hubieran hecho los demás”.
CUBITO.- Toro negro, de la ganadería de «Las Salinas», propiedad de la familia Dapelo, lidiado en primer lugar, en la corrida celebrada en la plaza de Acho, de Lima, el 3 de noviembre de 1963. A petición de los propietarios de la vacada fue solicitado el indulto, a lo que accedió la presidencia.
En Cartagena (Murcia) se celebró un Festival el 3 de noviembre de 1968 a Beneficio del Hogar de la Infancia. Se lidiaron cinco novillos de Fermín Bohórquez para lidia a pie y uno de los Hermanos Peralta que rejoneó el caballero Rafael Peralta al que se premió con las dos orejas y el rabo. Fueron ovacionados Juan Posada en el primero, Curro Romero en el segundo y Julián García en el quinto y cortaron dos orejas, Juan García “Mondeño” en el tercero y Ricardo de Fabra en el cuarto.
En Zaragoza nació el que llegara a matador de toros José Raúl Gracia Herrera “El Tato”, el 3 de noviembre de 1972. De familia taurina, su padre y su abuelo vistieron de seda y plata y utiliza como apodo el tratamiento que le daban en su casa. Tomó la alternativa en su Zaragoza natal el 7 de octubre de 1992 con Pedro Gutiérrez Moya “Niño de la Capea” que le cedió la lidia del toro Camarito nº 13 de Baltasar Ibán en presencia de Ortega Cano.