Entrar en el despacho de Rocío Cámara Pellón, concejala de Cultura y Turismo, ubicado en el centro cultural, es como entrar en un museo. Un lugar donde la inspiración y la creatividad es posible. Con ella hablamos y nos hizo balance de su primer año al frente de esta concejalía y los planes que tiene para lo que queda de mandato.
Estamos en un municipio que es referente de festejos y cultura de la zona norte de Madrid. ¿Qué balance haces de este primer año, casi, de mandato?
Yo venía de ser concejala de Cultura y Turismo, y el balance siempre es positivo. En Colmenar siempre hay mucha demanda, y por tanto, mucha oferta cultural, con festivales, música, oktoberfest, fiestas patronales, ‘La Vaquilla’, ‘La Maya’… Y, además, el día a día cultural de Colmenar. Contamos con tres bibliotecas, centros culturales, un auditorio, donde se programan obras de teatro de Madrid. La verdad es que la vida cultural en Colmenar Viejo es intensa.
Cuando programas un evento o una actividad, piensas en los vecinos, pero ¿también en los visitantes?
Se intenta traer y dar ocio a la gente que vive en Colmenar. Si además atraemos a gente de fuera, fenomenal. Es cierto que tenemos abonados que vienen de Leganés, porque tenemos obras de primer nivel, que han estado rodando en Madrid. De modo que, si no puedes bajar a Madrid, siempre tienes la opción de ver el espectáculo en Colmenar, a un precio mucho más económico, porque tenemos una ordenanza que regula los precios. El día que sacamos a la venta los eventos del auditorio lo vendemos todo. Este año hemos traído, pensando en la gente joven, monologuistas. ‘Pantomima Full’, por ejemplo, lo llenó. Para los mayores tenemos zarzuela y ópera. Hay que programar para todos los gustos. Luego también tenemos al público familiar, que es muy fiel, que vienen los domingos al auditorio, donde se programa títeres, circo, y cosas que a ellos les puede gustar.
Este año se celebra la XI edición de los ‘Proyectos Culturales’, ¿se ha hecho ya la selección?
Este año contamos con 35.000 euros para estos proyectos. Y si, ya se ha realizado la selección y son nueve los proyectos elegidos. Cada vez hay más asociaciones culturales las que nos ofrecen cosas muy interesantes y curiosas. Da mucha pena, porque siempre tienes que dejar alguno fuera. Si no los hacemos todos es por una mera cuestión económica.
¿Qué proyecto es el que requiere más inversión económica?
Los edificios, los espacios. Los jóvenes nos reclaman más zonas de estudio en las bibliotecas, sobre todo, como comentaba, en época de exámenes. Colmenar va creciendo y necesitamos más espacios. Tenemos un proyecto que es la creación de un centro cultural en la zona de la estación.
¿Cuándo verá la luz?
El presupuesto es de hace un par de años y los precios han subido. Es una cuestión de ajuste económico.
¿Hay alguna propuesta que te hayan hecho los vecinos o la oposición que te parezca una buena idea?
Si. Los vecinos siempre me hacen propuestas. Y la oposición lleva años planteando hacer un festival de música en la calle, y me parece buena idea. Les he dicho que nos sentaremos y lo veremos.
Todavía te quedan tres años por delante ¿Qué expectativas tienes?
Ampliar el número de plazas para que más gente pueda disfrutar de las actividades que ofrecemos, por ejemplo, en el Centro Cultural ‘Pablo Neruda’. Ahora hay cerca de mil alumnos y queremos ampliar a otros quinientos.
¿Dónde se pueden ver todas las estas ofertas culturales?
En mis redes sociales y en las del Ayuntamiento. Además, todos los viernes se hace un resumen de la programación semanal. Y todos los meses se publica en el boletín impreso, que se reparte en el municipio. en las bibliotecas, en la ‘Feria del Libro’, la ‘Semana del Libro’… Muchas de las actividades son propuestas por bibliotecarias, cuentacuentos… si no sería imposible subir el telón de un escenario sin tramoyistas, el de las luces, técnicos… Es una cadena de gente en la que participamos todos.
¿Por qué habéis elegido a Francisco Ibañez para homenajear en esta ‘Semana del Libro’?
Todos los años tratamos un tema central. El objetivo siempre es la animación a la lectura, dinamizar las actividades para que la gente se acerque a la biblioteca a leer. Este año nos hemos centrado en Francisco Ibáñez porque siempre intentamos atraer a los más jóvenes, y hemos querido hacerlo a través de ‘Mortadelo y Filemón’ y ‘Detectives a mogollón’. También nos apoyamos en Ágatha Christie, porque muchos primeros lectores se acercan a los libros a través de la novela negra. Es una literatura más accesible para edades tempranas y hemos querido acercar a estos lectores más noveles a las bibliotecas de esta manera.
¿Cuál es el último libro que has leído?
Estoy con un libro un poco extraño. Soy muy particular leyendo libros. Me gusta la novela negra. Se titula ‘Monstruito’. Es un libro que acabo de empezar. La verdad es que estoy leyendo unos cuatro o cinco a la vez. Uno de ellos es este. Mi marido tiene una librería, de modo que si no es por un lado, es por el otro, por el que en casa estamos siempre leyendo.
¿Cuesta mucho fomentar la lectura entre los colmenareños?
Sí, en general mucho, y más con las pantallas. Yo tengo niños y me cuesta mucho, sin embargo, no hay nada que le pueda gustar más a un niño pequeño que el que le cuentes un cuento. Lo tenemos poco explotado porque todos los que hemos tenido niños, sabemos que les cuentas un cuento y prestan atención. Se ve cuando hacemos actividades como cuentacuentos, los niños se acercan, y es un público muy fiel. Pero…llega un momento en la adolescencia, en el que los perdemos. Después la gente va retomando la lectura en la medida en que su vida se lo permite, porque vivimos un día a día que tampoco te deja mucho espacio para la lectura, pero si quieres siempre hay tiempo para acercarte a los libros.
¿Qué es lo que más demandan los vecinos en lo que a cultura se refiere?
De todo un poco. Depende de la franja de edad. Los jóvenes demandan espacios para ellos, cine, teatro… Tenemos, en el auditorio, los viernes y los domingos, una semana alterna, cine comercial y taquillero para ellos. Los mayores demandan más teatro, y los pequeños cuentacuentos, títeres, teatro de calle. Lo cierto es que la gente demanda cultura y lo noto. Ahora vamos a ampliar el horario de bibliotecas, porque nos lo están pidiendo los jóvenes para la época de exámenes. Siempre estamos atentos y escuchamos lo que los vecinos puedan decirnos. Si quieren más monólogos, pues se trata de traer más monólogos. En diciembre tuvimos un festival de magia porque las familias lo demandaron. Intentamos que todo el mundo tenga sus inquietudes cubiertas.
¿Hay algo que te apetezca ofrecer a tus vecinos, pero se te resiste?
Muchas cosas que me gustaría, pero sobre todo por cuestiones económicas. Tenemos un auditorio que puede albergar obras de gran formato, sin embargo, a veces los cachés de los artistas son elevados y no están al alcance de cualquier ayuntamiento. Pero todo lo que se puede hacer, por locura que parezca, se trata de sacar.
¿Qué tienes en mente ahora mismo que se pueda contar?
Vamos a hacer una exposición como la que se hizo con los maniquíes, en el anterior mandato, pero con las típicas ovejas churras colmenareñas. Serán unas 20 o 25, a tamaño real, y se las vamos a entregar a diferentes artistas para que las pinten y llenaremos el pueblo de ovejas. Cuando la exposición finalice, las colocaremos en una rotonda y formarán un artístico rebaño. En eso estamos.