En la actualidad, los desafíos tecnológicos, económicos y sociales confrontan a las compañías de bienes de consumo, destacando especialmente las rápidas transformaciones en los patrones de consumo.
Estos desafíos conjuntos repercuten en todos los niveles de las empresas, que deben ajustar sus estrategias para competir en el mercado. Es así como los especialistas en consumo han identificado las principales tendencias en el sector, centrándose en la vivencia del usuario.
La experiencia del cliente se ha transformado en un aspecto crucial de distinción en el sector. La amplia gama de posibilidades de artículos incita a los clientes a apreciar más la totalidad de la vivencia que experimentan con las empresas. Las compañías se concentran en brindar una experiencia de adquisición inolvidable y favorable en todas las interacciones con el consumidor que emocione y forje lazos con las marcas.
Hiper-Personalización de los productos, ofertas y recomendaciones, así como de la interacción del cliente con la marca en cualquier punto de contacto. La expectativa del consumidor es que se le atienda de forma individualizada, de manera inmediata. El propósito es brindar vivencias personalizadas y excepcionales para generar lealtad en los clientes. Esto se consigue mediante el pleno entendimiento de los consumidores, el cual se alcanza empleando de forma eficiente la información recopilada, implementando estrategias de marketing en plataformas como las redes sociales, y aprovechando tecnologías innovadoras como la realidad aumentada en el proceso de compra.
Con respecto a la salud y bienestar, se observa un creciente interés por parte de los compradores en los artículos que promueven la salud y el bienestar. Desde la concepción, la elaboración y el progreso del producto, las compañías de bienes de consumo consideran las ventajas prácticas. Se emplean la alimentación personalizada, la tecnología de alimentos, la integración o combinación con wearables.
La búsqueda de productos y vivencias locales por parte de los consumidores apunta a la localización y regionalización. La idea es comprender las culturas y tendencias locales para ajustar los productos y estrategias en este ámbito. Pueden emplearse las técnicas de análisis de datos geográficos y marketing culturalmente receptivo.
Las suscripciones proporcionan a los usuarios un modo de acceso más adaptable y continuado a productos y prestaciones. Se incorporan estas alternativas para innovar en la actividad económica y obtener ganancias repetitivas otorgando utilidad y también prestigio a los integrantes del sistema, obteniendo lealtad de su clientela.
El aumento del comercio electrónico prevé que una porción significativa del incremento en la industria se producirá a través de canales que conectan directamente con el consumidor. Esta evolución conlleva el desarrollo de alternativas B2C o B2B2C a través de plataformas de comercio electrónico, marketplaces, integradas con la logística de distribución y la entrega final.
Al ritmo acelerado en el que evolucionan tanto la tecnología como los hábitos de consumo en el mundo actual, resulta crucial que las compañías dedicadas a bienes de consumo se mantengan a la vanguardia de estas tendencias para conservar su competitividad. La adaptación personalizada, el énfasis en la salud y el bienestar, la promoción de lo local y regional, la implementación de modalidades de suscripción y el notable crecimiento del comercio electrónico, son señales evidentes del rumbo que está tomando el mercado.