Se ha declarado el agua en la capital abulense como inadecuada para el consumo por el Servicio Territorial de Sanidad de la Junta de Castilla y León, debido a las averías que están ocurriendo en la red de suministro. Como precaución, no se debe utilizar el agua para beber ni para la preparación de alimentos.
El agua en la Zona de Abastecimiento de Ávila capital está bajo un control de calidad sistemático, en línea con lo establecido en el RD 03/2023, que determina los criterios de calidad para el agua destinada al consumo humano. La Autoridad Sanitaria, en el marco del Programa de Vigilancia Sanitaria de la Comunidad de Castilla y León, ha informado que se ha encontrado un nivel elevado de Manganeso en el agua que se distribuye en el municipio durante los últimos análisis realizados.
El manganeso, que es un indicador de la calidad del agua y que se encuentra comúnmente en la alimentación humana, puede causar coloración y la aparición de sedimentos en el agua consumida cuando está en excesiva cantidad.
Siguiendo la normativa vigente, la autoridad sanitaria ha clasificado el agua como NO APTA PARA EL CONSUMO, por lo que no debe utilizarse el agua de la red pública para beber, cocinar o preparar alimentos. Sin embargo, se puede utilizar sin limitaciones para otros fines que no involucren su ingestión, como lavar ropa, realizar la higiene personal o lavar platos, entre otros.
Clasificación hasta nuevo aviso
Esta clasificación se mantendrá hasta nuevo aviso. El ayuntamiento, junto con la empresa Aqualia, que gestiona el ciclo integral del agua en la ciudad, están trabajando en conjunto con las autoridades sanitarias para evaluar diferentes soluciones que permitan resolver la situación en el menor tiempo posible.
Rupturas en la red de suministro
De manera simultánea, continúa Ávila con labores de reparación en la red de suministro de agua, a través de Aqualia. Estas labores se llevan a cabo en una de las tuberías principales de abastecimiento que ha sufrido diversas roturas en los últimos días en la conducción entre la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) y el embalse de Serones.
La primera ruptura ocurrió durante el proceso de ampliación del polígono industrial de Vicolozano. Las roturas sucesivas, consecuencia de la antigüedad de parte de la red de suministro, están siendo atendidas por los servicios municipales.