EFEMÉRIDES, 9 de Febrero – Tauromaquia

270

En el taurino barrio de Triana de Sevilla, el 9 de febrero de 1896 nació el torero Manuel García López “Maera”. Se forjó actuando como banderillero en la cuadrilla de Juan Belmonte y, tras dos años de novillero, recibió la alternativa el 28 de agosto de 1921 en la Plaza de Toros de El Puerto de Santa María (Cádiz) teniendo a Rafael Gómez “El Gallo” como padrino que le cedió la lidia y muerte del toro Barquillero de la ganadería Gallardo González; Bernardo Muñoz “Carnicerito de Málaga” fue el testigo. Como reconocimiento y en su recuerdo, hay un azulejo conmemorativo en la calle Betis de Triana.

Fotografía de estudio de Maera

En la plaza de toros de Madrid, el 9 de febrero de 1913, el novillo Escribano de José Bueno, lidiado en primer lugar, dio una gravísima cornada en el vientre al novillero Andrés del Campo Alcaraz “Dominguín II” y, como consecuencia, falleció al día siguiente. Contaba con 25 años de edad y le acompañaron en el paseíllo Juan de Dios “Conejito III” y Pedro Carranza “Algabeño II”.

Montaje fotográfico de Dominguín

En la Plaza México de la capital, confirmó la alternativa el diestro azteca Miguel Espinosa Meléndez “Armillita Chico”, el 9 de febrero de 1979 teniendo como padrino a su compatriota Mariano Ramos que le cedió el toro Jarabe de Jaral de Peñas con Pedro Gutiérrez Moya “Niño de la Capea” de testigo.

Miguel Armillita

En Valdemorillo (Madrid) se lidiaron toros de Antonio San Román el 9 de febrero de 2002. Abrió el cartel Rafael Camino y lo cerró Jesús Millán que escucharon palmas al concluir sus trasteos. El triunfador de la tarde fue Eduardo Dávila Miura que paseó una oreja del segundo y realizó una sensacional faena en el quinto, Jaramillo nº 76 que fue premiado con la vuelta al ruedo después de que le fueran entregadas al torero las dos orejas. Dávila Miura salió de la plaza a hombros de los aficionados.

Dávila Miura a hombros en Valdemorillo

En El Escorial (Madrid), el 9 de febrero de 2014, falleció la ganadera de reses de lidia  salmantina Amelia Pérez-Tabernero Montalvo cuando contaba con 95 años de edad. Formaba parte de una de las sagas ganaderas más largas en el mundo del toro bravo; hija de Antonio Pérez-Tabernero Sanchón y hermana de Antonio, Juan Mari y Mercedes que también dejaron descendencia de ganaderos.

Amelia en su finca de El Escorial