En Alcobendas se realizó un conmovedor acto de homenaje en el Parque Víctimas del Terrorismo, en memoria de las víctimas de los ataques terroristas del 11 de marzo de 2004.
Este fue el peor ataque en la historia de España, cumpliéndose ya 20 años desde entonces, causando la muerte de 193 personas y dejando a casi dos mil heridas.
La acción, a la cual asistieron estudiantes de los centros educativos Ágora y Santa Teresa, así como numerosos residentes, ha iniciado con la ejecución al piano y al violonchelo de la composición musical ‘Nina’, de Giovanni Battista Pergolesi, a cargo de Pablo Igualada y Pilar Olmo, docentes de la Escuela Municipal de Música y Danza y, posteriormente, se guardó un minuto de silencio en memoria de todas las personas afectadas por el terrorismo.
Después de la intervención de Adolfo Gutiérrez de Gandarilla, director del I.E.S Ágora, quien rememoró su experiencia del 11M, la alcaldesa Rocío García Alcántara ha afirmado que los ataques impactaron los fundamentos de nuestra coexistencia y dejaron una marca indeleble en nuestro corazón como comunidad.
“Debemos honrar a las víctimas -ha continuado- y mantenerlas vivas en nuestra memoria. vivas. Frente al terrorismo hemos demostrado fuerza y unión para proteger el proyecto europeo que es sinónimo de paz, progreso y solidaridad. En nombre de Alcobendas, quiero trasmitir todo nuestro cariño a los familiares de las víctimas del 11M.”
Ofrenda
En memoria de las 193 víctimas mortales, se colocó una vela junto al Monumento a las Víctimas del Terrorismo por parte de todos los asistentes, encabezados por la alcaldesa, el director del I.E.S. Ágora y los portavoces de los grupos municipales en el Pleno de la Corporación, mientras Pablo Igualada y Pilar Olmo interpretaron las obras ‘El cisne’ de Camille Saint-Saëns y la canción popular catalana ‘El cant dels ocells’.
Cada 11 de marzo, el Parque de las Víctimas del Terrorismo se convierte en el sitio de memoria de esta fecha.
Además, en este enclave se llevan a cabo los eventos de homenaje a otros actos terroristas, como el del concejal del PP Miguel Ángel Blanco, quien fue víctima de ETA en julio de 1997.
