Se lleva a cabo la Semana Europea de la Reducción de Residuos del 16 al 24 de noviembre, donde se motiva a los habitantes de Colmenar a realizar actividades de sensibilización acerca de la gestión responsable de recursos y desechos. En esta ocasión, el enfoque está en disminuir el desperdicio de alimentos.
“El objetivo de esta campaña es sensibilizar a los ciudadanos sobre las estrategias de reducción de residuos, reutilización de productos y reciclaje de materiales para mejorar sus hábitos de consumo, además de concienciar sobre el problema de la basura, que afecta a los hábitats naturales y humanos”, señaló Felipe Mansilla Nogales, concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad.
“En el marco de esta campaña, el Ayuntamiento ha elaborado una serie de acciones formativas e informativas para cambiar la forma en que producimos, consumimos y distribuimos alimentos, concienciando a empresas, asociaciones, escuelas y ciudadanos del impacto medioambiental, económico y social del desperdicio de alimentos”, puntualiza el concejal.
¡Tú comida no tiene desperdicio!
Reducir el desperdicio alimentario sí es posible:
– Planifica tu menú semanal.
Ahorra recursos, tiempo y dinero. Antes de hacer la compra, elabora un menú semanal, crea una lista de productos en función de las recetas que deseas preparar.
– Compra local y de temporada.
Reduce el impacto medioambiental de tus compras. Apoya la economía local. Consume alimentos de temporada, más frescos y de mejor calidad.
– Compra productos a granel.
Así puedes comprar las cantidades exactas de los alimentos que necesitas, reducir el uso de envases y ahorrar en tus compras.
– Conserva adecuadamente los alimentos.
Mantén la nevera limpia y ordenada. Organiza bien los espacios: coloca delante lo que vaya a caducar primero. Utiliza recipientes adecuados para conservar la comida.
– Comprueba el etiquetado de los alimentos.
Recuerda que la fecha de consumo preferente indica la calidad óptima del alimento, mientras que la fecha de caducidad indica hasta cuando puede consumirse.
– Reutiliza los alimentos sobrantes.
Ajusta las raciones a lo necesario. Utiliza los restos para preparar nuevas comidas. También puedes congelar las sobras en porciones individuales para consumirlas en el futuro.
– Separa y recicla tus residuos.
Separa los residuos y deposítalos en el contenedor correspondiente. Si puedes, también elabora tu propio compost con los desechos orgánicos generados en tu hogar.
– Adopta una vida más sana y sostenible.
Las comidas sanas no tienen por qué ser muy elaboradas. Hoy en día abundan recetas saludables, rápidas y accesibles que puedes compartir con familiares y amigos.