La concejal no adscrita de Boadilla, Silvia Hernández Torrado, presentó, el pasado Pleno de abril una propuesta para instar al Ayuntamiento a la instalación de contenedores accesibles y adaptados a personas con discapacidad o movilidad reducida.
Durante su intervención, Hernández Torrado, comentó la necesidad de subsanar los problemas a los que se enfrentan las personas en silla de ruedas a la hora de verter los residuos a los contenedores de residuos sólidos urbanos, vidrio o papel, cuyas aberturas, tal y como explicaba la edil, “son a menudo inalcanzables y conllevan muchas dificultades para personas con edad avanzada”.
Un problema que se agrava con el actual sistema de apertura a través de pedal, hecho que imposibilita, en muchos casos, tareas tan cotidianas como depositar la basura o reciclar residuos.
Ante este hecho, Hernández Torrado proponía seguir el ejemplo de otros Ayuntamientos en los que han empezado a colocarse “contenedores más aptos para ser utilizados por personas con capacidad reducida o invidentes”. Unos contenedores que cuentan con una apertura extra, a tan solo un metro del suelo, que permite a las personas con discapacidad depositar los residuos “sin ningún problema”.
La propuesta fue rechazada por los votos en contra del PP y la abstención del resto de grupos. Una decisión tomada tras escuchar al concejal de Medio Ambiente, David Mesa, quien argumentó los aspectos negativos de dichos contendedores en cuanto a su volumen y funcionalidad; y aseguró que se colocarían bajo demanda vecinal expresa.