Entrevista a Nuria Cuevas, presidenta de la Asociación de Mujeres Progresistas de Toledo
¿Qué les ha impulsado a crear esta asociación?
Nos ha impulsado sobre todo la necesidad de visibilizar la desigualdad que aún existe entre hombres y mujeres. La lucha por construir una sociedad más igualitaria. La necesidad de defender los derechos de las mujeres. Visibilizar las desigualdades y de implementar acciones y medidas para contribuir a ello. Instar a instituciones, partidos y organismos a que implementen estas acciones de una manera efectiva para intentar lograr la meta que es construir una sociedad igualitaria y democrática.
¿Cuáles son los objetivos de la asociación?
Fundamentalmente crear una red de mujeres para aunar voces. Denunciar esas desigualdades existentes aunando voces para crear una voz colectiva de mujeres. Servir de altavoz para mujeres que lo tienen más complicado como las mujeres en ámbitos rurales o inmigrantes. Ser el altavoz de estas mujeres para poder llegar a las instituciones y poder manifestar su problemática. Crear una red de estabilidad ya que estamos en un mundo androcéntrico, todo se ve desde los ojos de los hombres porque son los que en realidad tienen el poder. Históricamente todo se ha venido construyendo a partir de la necesidad masculina entonces las necesidades de las mujeres se pueden ver como antojos, caprichos… no con tanta firmeza. Cuando unificas a un conjunto de mujeres estratégicamente sirve de sostén, de respaldo para dar seguridad a esas demandas. Para tener y dar más fuerza ante esas demandas. Entender que son justas y que lleguen donde tienen que llegar y que las instituciones entiendan como suyo la implementación de estas medidas ya que aquello de lo personal es político del movimiento feminista de antaño sigue siendo una demanda de hoy. Lo que podemos entender como personal es del estado porque la construcción de una sociedad democrática es algo estatal, no es algo personal.
¿Qué le ha llevado a dirigir esta asociación?
Yo soy feminista desde que tengo uso de razón. He luchado por las mujeres desde que tengo uso de razón y lo voy a seguir haciendo hasta el final de mis días. He ocupado distintos puestos de responsabilidad vinculados a la mujer. Cuando no he ocupado puestos de responsabilidad para la lucha de mujeres, cuando he trabajado de docente igual, me volcaba en ayudar a las chicas y a los chicos a que tuviesen esta conciencia, esta perspectiva de género para que tuviesen una conciencia.
¿Con qué actitud asume estas responsabilidad?
Lo hago con mucha ilusión y el pleno convencimiento de que es imprescindible porque ahora tenemos una amenaza real de los grupos de ultraconservadores, llegando a insertar sus mensajes en la sociedad entonces es preocupante. Cada vez se pone más difícil, lo estamos viendo en los Estados Unidos como avanzan estos grupos. Todo lo que revierte en derechos y revierte en la democracia a las mujeres nos afecta mucho más, ya que se cuestionan lo primero nuestros derechos, los de las mujeres.
¿Cómo cree que ha sido acogida la creación de la asociación?
La acogida ha sido brutal, extraordinaria, se ve y se palpa esa necesidad de las mujeres de la provincia. Tengo que decir que no nos vamos a limitar solo a la provincia. Actualmente la Asociación de Mujeres Progresistas, la que está inscrita ya es local-provincial pero estamos creando la junta directiva de la Federación Regional de Mujeres Progresistas. En breve vamos a inscribir lo que es la Federación y vamos a estar todas vinculadas.
¿Qué acciones o actividades van a fomentar?
Desde sensibilización, ayuda…. El proyecto que hemos estado mirando con la Cruz Roja es de asesoramiento social-laboral, por poner un ejemplo, va dirigido a las mujeres de manera que se inserten en la sociedad según los requisitos que requiera cada una. Señalar que estados empezando pero de momento vamos a solicitar una línea de acción para implementar con la Federal de Castilla-La Mancha proyectos de sensibilización para dar visibilidad a lo que es la subordinación femenina, la cosificación de la mujer. Crear esa red de mujeres para ayudar a mujeres que puedan estar sufriendo violencia sexual, de género. La violencia de género se limita legalmente al vínculo con una pareja o expareja, pero nos gustaría ir más allá y atender a violencia sexual y subordinación femenina en general y agresiones de todo tipo, como la mutilación genital femenina, prostitución…Las mujeres prostituidas son víctimas, bajo mi entender, de violencia de género.
¿Qué es para ustedes el 8M y que significado tiene?
Es un día que va asociado al movimiento feminista de una manera histórica y es un día para visibilizar estas diferencias que existen entre mujeres y hombres, para visibilizar esa subordinación, para defender los derechos, reivindicar esas acciones tanto a instituciones, organismos, partidos políticos, sociedad en general, a la ciudadanía, para llegar a la meta de construir una sociedad democrática e igualitaria, donde podamos vivir en igualdad hombres y mujeres.
¿Cómo definiría el feminismo?
El feminismo para mí es ser igualitaria. El feminismo lleva la agenda de la mujer como objetivos que hay que cumplir paso a paso, en función del momento histórico y el contexto para conseguir que las mujeres seamos libres, nos desarrollemos plenamente en igualdad de condiciones como ciudadanas, igual que los varones. El feminismo es un movimiento impulsado por una agenda histórica y contextual para conseguir que las mujeres seamos felices, libres y ciudadanas de pleno derecho.
¿Qué derechos cree que le faltan o hay que mejorar con respecto a las mujeres?
Todos. Somos el 50% de la población y por ello necesitamos estar en el 50% de todo, de la economía, de la política, del poder de decisión, absolutamente de todo que actualmente no lo estamos. Es verdad que hay medidas, cuotas que son muy necesarias pero las mujeres no ocupamos realmente puestos de responsabilidad, las hay que sí, pero no al 50%. Estamos ocupando espacio público pero no decisorio, no ocupamos puestos decisorios. Como vemos las mujeres la sociedad, las necesidades, y es que el liderazgo de una mujer es distinto al de un hombre. Es necesario ya que la sociedad está como coja, falta una visión femenina acorde a todo lo que hemos vivido. Simplemente el hecho de no poder estar sola por la noche sin miedo es suficientemente limitador como para impedir el desarrollo integral como persona y eso es una medida que debería estar. La educación para la igualdad es algo que debería estar en la educación secundaria obligatoria porque no es una sociedad igualitaria, la violencia en jóvenes es un hecho, y si no se implementa esa medida de carácter general las nuevas generaciones, que son en las que nos vamos a apoyar para crear la sociedad del mañana no van a estar suficientemente formados como para construir la sociedad que todos y todas queremos.
¿Qué medidas deben tomar las instituciones o las administraciones para lograr la igualdad?
Todas las que ya están haciendo. Tenemos la Ley 2004, la Ley de Violencia de Género, tenemos el Viogén, el pacto de Estado que se ha renovado por 5 años más… medidas se hacen, ahora lo que hace falta es que esas medidas reviertan. Tenemos una Ley del Aborto aprobada desde el 2011 que aún hoy no se puede interrumpir el embarazo en una Seguridad Social gratuita y universal. Es desarrollar y aplicar de una manera efectiva medidas que ya existen pero llevarlas a que reviertan directamente en la mujeres sin obstáculos, sin barreras.
¿Cómo cree que se encuentra la situación de la violencia de género y si se ha avanzado en la lucha contra esta lacra?
Avances hay en cuanto a denuncias. Desde el 2003 vemos que se denuncia, que se contabilizan los datos pero pienso que es ínfimo comparado con la violencia de género existente. Solo se contabilizan las mujeres asesinadas pero es alarmante el número de agresiones por violencia de género existente que afortunadamente no culminan en un asesinato. Se debería detectar de muchas otras formas, es algo que se hizo muy bien en su día pero que con el transcurso del tiempo se queda cojo. Hay que implementarlo de otra forma con una concienciación y una sensibilización de la población real y una contabilización para ver el gran drama de esta lacra social.
¿Cómo ve la situación de la mujeres en el ámbito rural?
En el entorno rural dificulta mucho la situación de las mujeres porque están aisladas de poder denunciar, se ven atrapadas, indefensas. Es algo que acentúa su situación de vulnerabilidad por la invisibilidad, por la limitación de recursos, del acceso a éstos, de denunciar su situación, de tener una red próxima por lo que es fundamental que esa mujeres se vinculen a una asociación para sentirse respaldadas, escuchadas y entendidas.
¿Y en las ciudades?
La situación de la mujer es de subordinación en general, en ciudades en pueblos o donde sea. Lo que sí creo es que en las ciudades es más fácil porque hay más población, es más fácil reunirse con más mujeres, están las instituciones, los Centros de la Mujer. Actualmente en Castilla-La Mancha existen Centros de la Mujer, casas de acogida, estuve trabajando de directora provincial del Instituto de la Mujer, por eso lo conozco, donde hay profesionales que trabajan realmente bien, muy formadas del ámbito laboral, social, jurídico, psicológico que ayudan a las mujeres, que es un recurso al que pueden acceder la mujeres para solicitar ayuda así como muchas asociaciones de mujeres donde también se pueden dirigir.