El Ayuntamiento de Pozuelo ha incrementado la presencia policial en las calles durante la campaña de Navidad para garantizar la seguridad en el municipio.
La alcaldesa de Pozuelo de Alarcón, Susana Pérez Quislant, manifestaba que «garantizar la seguridad de nuestros vecinos durante la Navidad es el objetivo del equipo de Gobierno para estas fiestas».
Concretamente, desde el día 12 de diciembre y hasta el 7 de enero, los cuerpos de la Policía Municipal y Nacional, se complementarán para evitar molestias por ruido a determinadas horas de la noche y para implementar controles de alcohol y drogas en vehículos.
Asimismo se está reforzando la presencia policial en las calles más comerciales y las grandes superficies para evitar robos de vehículos y persuadir de hurtos a personas en su interior o inmediaciones.
Las zonas residenciales también están viendo incrementada su vigilancia policial con patrullas en vehículo con el fin de persuadir los robos en viviendas y para evitar molestias por ruido a determinadas horas.
Asimismo, y debido a las especiales circunstancias que envuelven esta Navidad, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, están haciendo especial hincapié para hacer cumplir el horario estipulado de toque de queda.
Con especial atención a los días 24 y 31 de diciembre, donde el horario se ampliará hasta la 1:30 de la madrugada. A esa hora, la Policía hará cumplir la normativa de la Comunidad para que los locales cierren a su debida hora y para evitar concentraciones pasada la 1:30.
Además, se ha incrementado la presencia policial en las actividades navideñas programadas por el Ayuntamiento. Es el caso del mercado navideño o los puntos de partida y llegada del Tren de la Navidad, que albergan un importante número de gente. También está preparado un dispositivo especial para los días en los que sus Majestades los Reyes Magos lleguen a Pozuelo para recibir las cartas de sus vecinos más jóvenes.
«Nuestra Policía Municipal va a incrementar su presencia en los principales puntos de reunión de personas durante estos días festivos para garantizar la seguridad y prevenir robos y hurtos», concluía la alcaldesa Quislant.
